A veces la vida nos lanza bolas curvas.
Jake Donovan fue mío.
Se suponía que era cosa de una sola vez. Un regalo de cumpleaños sexy para Willow. No se suponía que él tuviera ese efecto en mí.
Pero lo hizo.
No se suponía que debía consumirme.
Pero lo hizo.
No se suponía que tu debía tocarme en lugares que ningún hombre me había tocado antes.
Pero lo hizo.
Y yo quería que lo hiciera de nuevo.